Orígenes del flamenco

La primera referencia escrita donde aparece el término «flamenco» en relación a la música es en 1847. Se trata de una gacetilla publicada en El Espectador el 6 de junio bajo el título: «Un cantante flamenco», refiriéndose a Lázaro Quintana, sobrino de «El Planeta» (Antonio Monge, de los primeros cantaores de los que se tiene constancia).

Según Faustino Núñez (Flamencopolis) el flamenco es una reinterpretación del folclore andaluz, en la que el pueblo gitano ha tenido un papel relevante en la baja Andalucía. Además, cabe añadir que la profesionalización del género hace que se consolide como tal. 

Cante jondo es otros de los términos que también hace referencia al flamenco.

El cante, el toque y el baile son las disciplinas tradicionales sobre las que se ha desarrollado el flamenco.

Evolución histórica del flamenco: etapas

Según García Lavernia (1991) las principales etapas del flamenco son las que se muestran a continuación:

Hermética (1800-1860)

El flamenco se desarrola en un ambiente ínitmo y no profesional. Destacan nombres como Juan Encueros, el Fillo, el Jerezano o el Planeta. 

Cafés Cantantes (1860-1910)

Los cafés cantantes eran locales semejantes a una taberna, aunque de mayores dimensiones y que tenían un pequeño escenario (tablao) donde se bailaba flamenco. En esta época se consolida el cuadro flamenco formado por toque (guitarra), cante, y baile (normalmente dos bailaores/as). Y además, empeizan a formarse cuadros de artistas no gitanos.

Los cafés cantantes tenían su epicentro en Sevilla y destaca el regentado por Silverio Franconetti en la calle Rosario. Silverio, además de empresario, fue cantaor. Se consolidan los bailes de las seguiriyas, tonás y soleá. Destacamos artistas como Manuel Cangancho, Paco la Luz o la Niña de los Peines (Pastora Pavón).

Por último, señalar se inicia un movimiento antiflamenquista, liderado por la Generación del 98 a excepción de los hermanos Machado.

Cante en le teatro (1910-1922)

Debido a la decadencia de los mencionados cafés cantantes, el flamenco se desarrolla principalmente en el teatro. Esto supone una simplificación en el cante. 

Alguno nombres son: Antonio Chacón, Fosforito, Juan Breva, La Argentinita, la Argentina (Antonia Mercé), Pastora Imperio o Carmen Amaya.

Ópera flamenca (1922-1936)
Posguerra española (1939-1959)

Con epicentro en Nueva York entre los años 1935 y 1945 se desarrolla el estilo swing. Su principal característica, de la que coge prestado el nombre, es el ritmo de swing. Consiste en una flexibilidad rítmica donde dos valores iguales pasan a convertirse en un valor más largo que el otro y viceversa.

Además se consolidad la big band, agrupación musical formada por un cuarteto de jazz (piano, guitarra, bajo y batería) junto a una orquesta de viento (cuerda completa de saxofones junto a metales). 

Destacan músicos como Benny Goodman, conocido como «el rey del swing«. Como dato curioso en el 1938 fue la primera vez que el jazz tuvo su sitio en el Carneige Hall, a cargo de Goodman. El Carneige es el auditorio por excelencia asociado a música académica (clásica), y este concierto supuso el reconocimiento del jazz como género.

Por último, en el 1939 se fundó el sello discográfico Blue Note, del que hablaremos en otra ocasión. 

Renacimiento (1956-2000)